Tras el debut de The Shield en Survivor Series 2012, cada miembro del trío recibió la oportunidad de brillar individualmente. Los tres hombres, Seth Rollins, Dean Ambrose (ahora Jon Moxley) y Roman Reigns, a través de luchas individuales y por equipos, tuvieron tiempo suficiente para demostrar sus respectivas fortalezas. Mientras que Rollins fue el gran volador y Ambrose fue el comodín, Reigns fue sin duda la potencia. No era raro que Reigns dominara a uno o más competidores con facilidad. A través de estos diversos momentos, puede detectar las primeras semillas de su futuro impulso que se están plantando.
El apogeo de la construcción de este personaje formativo alcanzó su punto máximo en Survivor Series 2013, un año después de su debut en la lista principal. El campo estaba listo, The Shield, Jack Swagger y Cesaro contra Cody Rhodes, Goldust, The Usos y Rey Mysterio. Sin duda, una mezcla ecléctica, pero resultó en un enfrentamiento bastante entretenido y un buen escaparate para The Shield. Sin embargo, fue Reigns quien más se beneficiaría de la lucha, especialmente después de ser coronado como el único sobreviviente. Terminando con Rey Mysterio para obtener el uno-dos-tres, Reigns fue quien se quedó parado cuando el polvo se asentó, el primer gran paso en el camino hacia la grandeza.